El pasado fin de semana, Elon Musk anunció el cambio de nombre de Twitter por X, provocando un debate de proporciones e incontables posteos.

Lo que se ha llamado “la muerte del pajarito azul” era una idea que el empresario sudafricano había esbozado en varias oportunidades, comentando su intención de crear “una app para todo”.

Esa app es lo que Musk tiene previsto para X, aunque ha recogido más que nada escepticismo y desconcierto desde el anuncio.

Marcas como Burger King. KFC, Taco Bell, Oreo y Kit Kat en España reaccionaron rápidamente y con humor a la repentina desaparición del pajarito, lamentando su partida y comentando la irrupción de la X.

De acuerdo a lo explicado por el dueño de la plataforma, el cambio de nombre se debe al salto a una nueva etapa, donde la app disponga de múltiples servicios digitales, desde pagos online hasta ecommerce y mensajería.

Todo esto estaría basado en la exitosa app china WeChat, a la que querría emular Musk en Occidente.

Sin embargo, la plataforma parece ir decayendo inexorablemente desde que el empresario está a cargo, con avisadores retirándose de la red por los cambios en la política de verificación de cuentas y la relajación de la moderación de contenidos, además de una pérdida constante de usuarios y una crítica que parece generalizada a esta última y controvertida decisión.

Así, solo queda esperar para ver la próxima jugada de Musk, quien tiene toda su fe depositada en que X será una de las empresas más poderosas del mundo.

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