La neurodiversidad: una fuerza creativa en la industria de las comunicaciones
La idea de que la industria creativa atrae y nutre a una mayor proporción de profesionales neurodivergentes no es nueva, pero sí fascinante. La esencia de las comunicaciones, a diferencia de otros sectores más rígidos, es su espíritu de libertad creativa. Aquí, lo que realmente importa es cómo tu pensamiento único puede fluir y transformarse en ideas innovadoras. Este sector valora enormemente la autonomía y la diversidad cognitiva, mucho más que en trabajos donde prevalecen las rutinas y procedimientos establecidos. Por esta razón, las personas neurodivergentes encuentran un campo fértil para desarrollar sus habilidades, ya que su forma única de ver el mundo es no solo aceptada sino celebrada. Este entorno promueve que, tanto diagnosticados como no diagnosticados, encuentren su lugar, lo cual es un testimonio de la inclusividad y apertura del mundo de las comunicaciones.
Desde mi perspectiva, esta dinámica crea una sinergia impresionante donde la diversidad cognitiva se convierte en una fuente inagotable de innovación y creatividad. Es un círculo virtuoso: la industria se beneficia de las habilidades únicas de los profesionales neurodivergentes, y estos profesionales encuentran un espacio donde pueden expresarse libremente y ser valorados por sus contribuciones singulares. En pocas palabras, la industria creativa no solo está dispuesta a aceptar la neurodivergencia sino que, de muchas maneras, se ha diseñado para prosperar gracias a ella.
El diálogo sobre la neurodiversidad en la industria creativa y más allá es creciente, pero aún enfrenta desafíos únicos en comparación con otros tipos de diversidad como género, edad u orientación sexual. La diferencia principal no radica en un “estatus” distinto dentro de la jerarquía de la diversidad, sino en nuestra comprensión colectiva de lo que implica la neurodiversidad y la variedad de experiencias y perspectivas que engloba. Es crucial reconocer que la neurodiversidad abarca un amplio espectro de condiciones y experiencias individuales, cada una con sus propias características y necesidades. La educación y la sensibilización son fundamentales para superar las barreras de la invisibilidad y los malentendidos. Al mejorar nuestra comprensión de la neurodiversidad, podemos crear entornos más inclusivos y empáticos que valoren y celebren las diferencias individuales como una fuente de fuerza y creatividad, además, ayuda a superar estereotipos y sesgos anticuados, como los que podría inspirar una película como “Rain Man”, reconociendo el valor único que los superpoderes neurodivergentes aportan al ambiente laboral, especialmente en las comunicaciones publicitarias.
En los últimos años, hemos visto un incremento en la conciencia y las acciones por parte de empresas y agencias en cuanto a la inclusión de personas neurodivergentes. Un muy buen caso de estudio de esta tendencia es el enfoque adoptado por “Corona”. Esta empresa no solo ha implementado acciones significativas en relación con la diversidad, equidad e inclusión (DEI), específicamente en el ámbito de la neurodiversidad, sino que también ha hecho cambios notables en su ambiente laboral para ser más accesible a las personas neurodivergentes. El compromiso de “Corona” va más allá de ajustes ambientales. La empresa ha estado trabajando activamente en su cultura corporativa, colaborando con fundaciones especializadas para crear un entorno laboral que no solo sea consciente de la neurodiversidad, sino que también la celebre y fomente su inclusión de manera efectiva. Este enfoque holístico hacia la neurodiversidad no solo beneficia a los empleados directamente implicados, sino que también mejora el ambiente laboral para todos, promoviendo un entorno más inclusivo, empático y diverso. Además, al alinear sus prácticas internas con las necesidades y tendencias sociales actuales, “Corona” y empresas similares se posicionan favorablemente en el mercado, mostrando un compromiso auténtico con la inclusión y la responsabilidad social corporativa.
En el terreno del marketing y la comunicación, estamos presenciando un creciente reconocimiento de la importancia de la inclusión de personas neurodivergentes. Cada vez más, marcas y empresas están tomando iniciativas para ser más inclusivas, tanto en sus estrategias de marketing como en la creación de entornos laborales acogedores para todos. Sin embargo, a pesar de estos avances, el sector aún tiende a actuar de manera reactiva más que proactiva. La inclusión, en muchos casos, no se ve como una prioridad o una necesidad inmediata, sino como una respuesta a presiones externas o tendencias de mercado. Esta mentalidad reactiva limita el potencial para una integración plena y significativa de las personas neurodivergentes, tanto en la creación de productos y servicios como en la narrativa de marca. Un cambio hacia un enfoque más proactivo implicaría considerar la inclusión de personas neurodivergentes no solo como una acción beneficiosa o moralmente correcta, sino como una parte esencial e integral de la estrategia de comunicación y marketing desde el inicio. Esto significa diseñar campañas que no solo eviten la exclusión, sino que activamente busquen involucrar a personas con diversas formas de neurodiversidad, reconociendo su valor único y las perspectivas que pueden aportar.
El papel fundamental de la comunicación, como su nombre indica, es transmitir mensajes que resuenen con toda la población, independientemente de sus condiciones o barreras. En la vanguardia de los eventos culturales contemporáneos, Lollapalooza se destaca por su iniciativa inclusiva, al incorporar espacios de descanso diseñados específicamente para personas neurodivergentes. Esta consideración refleja un cambio progresista hacia la inclusión y la accesibilidad en eventos de gran envergadura. En el ámbito del retail, se observa una evolución similar. Las tiendas están adaptando activamente sus condiciones ambientales, ajustando la iluminación y el sonido para crear entornos más acogedores para todos los clientes, incluidos aquellos neurodivergentes. Además, la implementación de horas de compra ‘silenciosas’ marca un paso significativo hacia la consideración y el respeto por las necesidades de todos los consumidores, demostrando un enfoque reflexivo y adaptativo en el comercio minorista. La tecnología, como siempre, juega un papel catalizador en la inclusión, desarrollando aplicaciones y herramientas digitales que apoyan a las personas neurodivergentes en áreas críticas como la comunicación y la organización. Estas innovaciones no solo facilitan la vida cotidiana de las personas neurodivergentes sino que también resaltan el potencial de la tecnología para ser una fuerza inclusiva y transformadora.
Las agencias pueden enriquecer su creatividad y perspectiva incluyendo más profesionales neurodivergentes en sus equipos. Para lograr esto, pueden adoptar estrategias como educar a los empleados sobre la neurodiversidad y cómo aprovechar sus ventajas puede fomentar un ambiente laboral más inclusivo y empático; adaptar los métodos de entrevista y selección para acomodar a candidatos neurodivergentes, reconociendo y valorando sus habilidades únicas más allá de las convenciones tradicionales; implementar ajustes que creen un entorno laboral más cómodo y productivo para personas neurodivergentes, como espacios de trabajo tranquilos y políticas flexibles; y trabajar con grupos y fundaciones de neurodiversidad para desarrollar prácticas inclusivas y aprovechar su experiencia y conocimiento. Al adoptar un enfoque proactivo, las agencias pueden integrar la neurodiversidad no solo como un acto de inclusión, sino como una estrategia esencial en la generación de contenidos y campañas publicitarias más ricas y variadas. Este compromiso con la neurodiversidad no solo enriquece el tejido creativo de las agencias, sino que también refleja un compromiso auténtico con una sociedad más inclusiva y diversa, alineándose con las expectativas contemporáneas de consumidores y colaboradores por igual.
La convergencia de estos avances nos lleva a conclusiones poderosas. La neurodiversidad, lejos de ser un desafío, representa una fuente rica y vibrante de oportunidades que pueden enriquecer profundamente nuestra comunicación. Al abrazar la neurodiversidad, nos desafiamos a innovar y a repensar nuestras formas tradicionales de conectar y expresar, infundiendo nuestra comunicación con una mayor profundidad de creatividad y empatía. El impacto de centrarse en la neurodiversidad trasciende los límites individuales, mejorando la calidad y el alcance de nuestra comunicación y, a su vez, enriqueciendo nuestros entornos laborales y creativos con una nueva dimensión de inclusión y diversidad. Esta perspectiva ampliada no solo mejora la efectividad de nuestra comunicación, sino que también nos posiciona favorablemente en el mercado, reflejando un compromiso genuino con la inclusión y la responsabilidad social corporativa. Por lo tanto, es imperativo que la industria de las comunicaciones adopte un enfoque proactivo hacia la neurodiversidad. Reconocer su valor intrínseco como fuente de innovación, creatividad y empatía no es solo un deber ético, sino también una estrategia inteligente para aquellos que buscan liderar en un mercado cada vez más diverso y consciente. Ahora es el momento de actuar, de abrir nuestras puertas a esta rica fuente de potencial y de forjar un futuro en el que la inclusión y la creatividad caminen de la mano en la vanguardia de la comunicación y la expresión.
Carolina Pinheiro
CEO Inbrax
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