Índice - temas

En Chile hay creatividad por APG Chile

En esta edición afirmamos con fuerza que en Chile sí hay creatividad. Una frase que nos entusiasma y también parece sorprender cada final de año, luego del cierre de la temporada de festivales creativos y que, en especial, se deja sentir muy claramente luego de analizar la convocatoria del festival Achap. En tres breves columnas, Ricardo Aros, Carolina Cuneo y Diego Perry nos comparten su mirada.

 

 

 

Mala asociación

por Ricardo Aros / MIA Challenge Driven Thinking.

 

Martin Weigel, admirado estratega inglés, nos despierta con la siguiente idea:

 

La constante asociación de la creatividad al riesgo y a la valentía es un error que desde siempre ha distorsionado y socavado a la creatividad, presentándola como una especie de tirada de dados o un impulso imprudente donde la posibilidad del fracaso total está profundamente arraigada.

 

Las ideas de lo creativo como algo irreverente, osado o disruptivo han creado una asociación negativa, al menos prejuiciosa, acerca una actividad u oficio cargado de “locurillas”, gastos innecesarios, egos desbocados, desorden, caprichos, etc.

 

He tenido mucha suerte, trabajé largos años en Porta durante su época de gloria, pude colaborar con el equipo creativo global de LeoBurnett Chicago, fui parte del equipo de global de Marcel/Publicis estando cerca de muchos procesos importantes y muy premiados. También he tenido el lujo de batallar licitaciones con destacados directores creativos en Chile, Uruguay, Argentina, Estados Unidos y Francia. Ahora tengo la fortuna de trabajar con Rodrigo Bravo en Vicent (la agencia de contenidos del grupo Wolf) y ser socio con Gonzalo Baeza, el Mktg Best 2023. Respecto de todo aquello, puedo afirmar con certeza que ninguna de esas experiencias de trabajo careció de rigurosidad, método y mucho foco.

 

Mis héroes de la estrategia y la consultoría han sido mis profesores, algunos de ellos mis jefes, con alguno también hemos tenido amistad, Rob Klingesmith, Lucy Jameson, Jim Carrol, Adam Morgan y, por supuesto, Andrea Matte. Todos altamente creativos, sofisticados, precisos, llenos de insight, tan efectivos con sus marcas como cariñosos con sus equipos y sus clientes.

 

También he trabajado y conocido mucho al mundo del research y sus researchers, he aprendido montones de ellos, de sus metodologías, de su generosidad y también de su creatividad. Mi colaboración con oficinas y profesionales como el desaparecido Lado Humano y el recordado Carlos Catalán, Felipe Lohse en el ex MillwardBrown, Andrés Varas en Criteria y Rossana Muñoz, mi esposa, que hoy está del lado de cliente en Nestlé, tras largos años en Kantar, me han agregado excelencia, objetividad, amplitud de mirada y grandes lecciones de colaboración.

 

Inicié mi formación como audiovisualista, cursé Cinematografía en la EICTV en Cuba, estudié muchísimo más de lo que imaginaba, con insospechados niveles de sacrificio y exigencia. En ese mundo he estado involucrado de distintas maneras con la dirección y la producción, experiencias que siempre me han dejado una gran admiración por la organización de sus profesionales, la agudeza de sus directores, la precisión de los fotógrafos y, por ejemplo, la incondicional disponibilidad de los runners, por sólo nombrar algunas cosas.

 

Por lo tanto, mi experiencia con todas esas partes de la industria creativa que acabo de describir se asocia a palabras como excelencia y disciplina, a la capacidad de identificar variables críticas y a la capacidad de movilizarlas en pos de un objetivo valioso. No tengo otra mirada y cualquier asociación acerca de que lo creativo implica lanzarse con valentía hacia la incertidumbre sin medir nada, a ojos cerrados y sin pensar mucho, me parece ignorante.

 

Me siento absolutamente parte y admirador del lado creativo, uno que, con mis socios en MIA, nuestra consultora de marcas, buscamos asociar hacia la constante búsqueda de desafíos, un lado creativo que vivo de cerca en Wolf BCPP como CSO, y que se trata de colaborar, cumplir y, sobre todo, de crear ideas valiosas.

 

No veo más espacio para que lo creativo se siga asociando a conceptos confusos y limitados que hablan de cierta “onda creativa”, pero no de una industria que siempre es capaz de superarse a sí misma, que crea valor continuamente (de maneras absolutamente concretas) y que hoy con la transformación de Achap en la Cámara de Empresas Creativas de Chile, da muestras de que la asociación correcta con lo creativo es, y debe ser, la de una industria capaz de dinamizar la inagotable riqueza del capital humano y de todas las industrias con que interactúa.

 

Que tengan todos un gran 2024, cargado de mucha creatividad.

 

_____________

 

 

El riesgo como motor creativo

Por Carolina Cuneo / GFK Chile.

 

Cerramos el año, y pese a las dificultades que éste ha tenido, tanto para las personas como para los negocios, hacemos cuentas felices en términos de creatividad.

 

La semana recién pasada pudimos deleitarnos con grandes piezas premiadas en Achap y, antes de eso, nos pudimos enorgullecer con otros tantos premios más en Cannes, dejando evidencia de la calidad del trabajo creativo que hay en nuestro país.

 

Y esto es un gran mérito, ya que en tiempos contraídos se tienden a tomar acciones conservadoras, evitando al máximo cualquier riesgo, bajo la ilusión de poder controlar algo de lo que ocurre a nuestro alrededor. Y esto, sin duda, afecta la calidad de la creatividad.

 

La creatividad es un proceso que implica la generación de ideas nuevas e innovadoras y, a menudo, conlleva cierto grado de incertidumbre y riesgo . Y ser capaces de jugar en esas condiciones es clave para poder transmitir en campañas ideas originales y atractivas para el público objetivo, y que transmitan el mensaje de la marca de una forma impactante y memorable. 

 

Y el tema del riesgo no es menor. Porque todo conlleva riesgo. Jugárnosla con ideas ‘out of the box’  sin duda lo lleva, pero, aunque podamos temer hacer  creatividad arriesgada, no hacer nada nuevo o diferente puede representar un riesgo mayor .

 

Para ilustrar con claridad el asunto del riesgo y la importancia de poder asumirlo a la hora de querer hacer buena creatividad, les traigo un ejemplo del mundo financiero.

 

En el mercado financiero, se puede encontrar a múltiples actores agrupados en diferentes categorías, entre las cuales está  “el nivel de aversión al riesgo” . Todos hemos sido clasificados en esta escala en alguna ocasión.

 

Las personas con mayor perfil de riesgo buscan que la rentabilidad de sus inversiones sea del nivel máximo posible, pero también están dispuestas a tolerar pérdidas. 

 

Por el contrario, las personas conservadoras aceptan un nivel de rentabilidad menor, pero estable, es decir, eligen productos que, en lo posible, no puedan generar pérdidas .

 

¿Agrego alguna explicación? Seguramente no es necesario.

 

La creatividad requiere inversión de tiempo y recursos económicos, trae consigo la incertidumbre y posibilidad de fallar. Al ser creativo se corre el riesgo de que las ideas o productos no sean aceptados por estar, quizás, avanzados en los tiempos en que vivimos, o simplemente porque descolocan. Sin embargo, esto no nos debe limitar a impulsar la creatividad e innovación .

 

La creatividad y el riesgo están estrechamente relacionados. No existe uno sin el otro. Somos nosotros los que podemos elegir de qué lado de la balanza o del perfil de riesgo antes ilustrado queremos estar.  

 

¿Cómo evalúas tu perfil de riesgo hoy?

¿Estas dispuesto a arriesgar y ganar? ¿O prefieres mantenerte seguro y asegurarte también de no ganar?

 

Feliz 2024, y vamos por mucho más riesgo y posibilidades de ganar.

 

_____________

 

 

LA CREATIVIDAD COMO PROPÓSITO

Por Diego Perry, CEO Wolf.BCPP y miembro del directorio de Empresas Creativas de Chile.

 

Pocos días atrás, en el marco del Festival de Creatividad de la Achap, se dio a conocer una noticia muy importante, un cambio que se venía trabajando hace varios años y que ahora por fin se materializa, la transformación de la “Achap” en “Empresas Creativas de Chile”. Este nuevo organismo nace con un propósito: Construir y garantizar un ecosistema de empresas creativas sostenibles y relevantes para la sociedad, las personas y el mercado moderno, con un indiscutido impacto positivo para la actividad económica del país”. Un propósito genuino, ambicioso, inspirador, y que nos desafía a todos a quienes de alguna forma participamos en la industria creativa.

 

En este mismo espacio de opinión escribimos hace más de tres años sobre el “propósito” en la columna “El despropósito” (https://www.anda.cl/revista/el-desproposito/) donde, entre otras cosas, comentamos que “el verdadero significado de propósito es muy diferente al que desarrollamos los marketeros, ya que este no tiene que ver con el por qué”, sino más bien con el cómo”. Propósito significa determinación”. O, como se explica en su versión de diccionario: Determinación firme de hacer algo. Es precisamente esta determinación la que nos permite entender mejor que significa este propósito declarado por  “Empresas Creativas de Chile”.

 

1_ La determinación de construir y garantizar un ecosistema de empresas creativas: Este primer elemento del propósito implica asumir un desafío gigante, generar un sistema equilibrado de relacionamiento en que la suma de las partes logre desarrollar el valor común que se busca construir y proteger. Por otro lado, nos enfrenta a asumirnos como “empresas” creativas, lo que nos obliga a establecer un compromiso profundo con la manera en que “hacemos empresas” en nuestra industria.

 

2_ La determinación de que sea sostenible y relevante para la sociedad, las personas y el mercado moderno: Las empresas creativas debemos desarrollarnos siempre en conexión con nuestro entorno social, cultural, humano y también de consumo. Es un equilibrio que las empresas creativas entendemos y leemos quizás con más naturalidad que otros sectores y eso es una fortaleza que debemos potenciar al máximo, porque es ahí donde está la base de nuestra sostenibilidad y relevancia.

 

3_ La determinación de impactar positivamente en nuestra economía: Sin duda, la “Economía Creativa” ha inspirado gran parte de esta transformación, y es el motor conceptual y ejecucional de la creación de “Empresas Creativas de Chile”, porque entendemos que ahí está gran parte de la oportunidad que detectamos, al visibilizar y luego desarrollar la industria creativa y su aporte al desarrollo económico de nuestro país.

 

Si el propósito es la determinación firme de hacer algo, Empresas Creativas de Chile nace bien, porque precisamente eso es lo que nos mueve, la determinación de poner en el centro la creatividad, e invitar a sumarse a todos los que se sientan parte de esta visión.

 

 

 

 

También te podría interesar: De interés Público por APG Chile

De interés Público por APG Chile.

 

 

Compartir en:
Skip to content