CONAR
El Consejo de Autorregulación y Ética Publicitaria (CONAR) cumplió 30 años promoviendo el desarrollo responsable de la industria, entre medios de comunicación, agencias de publicidad y medios, marcas, anunciantes y autoridades del área, y presentando la sexta edición del Código Chileno de Ética Publicitaria.
Durante estas tres décadas, su labor ha logrado que las empresas voluntariamente se hayan dado la capacidad de autorregularse con el fin de ofrecer una comunicación comercial responsable que cumple con altos estándares éticos establecidos en su Código y conocido por toda la industria, transformándose en un “Tribunal Arbitral de Honor” al cual se recurre para que resuelva las controversias que se susciten en materia de publicidad comercial, con un acatamiento de un 99% en los más de mil fallos dictados.
El actual presidente del organismo, Jaime Ahumada, valoró la voluntad de las matrices que conforman el CONAR (Anda, ARCHI, ANATEl, ANP e IAB), que crearon y han mantenido durante tanto tiempo este organismo. “El Código es un instrumento de autorregulación que, por voluntad propia, nos hemos impuesto las matrices. Todas creemos en la autorregulación porque evoluciona en sintonía con los cambios sociales y sus valores, permitiendo la flexibilidad que necesitamos”.
Nuevas tendencias de la publicidad y su digitalización
“Los cambios sociales y las nuevas exigencias del público, junto a la creación de nuevos medios, nos muestra un escenario actual que nos obliga a estar permanentemente adaptándonos, con el objetivo de robustecer la confianza de las personas en la publicidad”, expresó Ahumada.
El directivo celebró la incorporación en el Código de nuevas aristas que responden a las demandas actuales. “Hemos creado un artículo sobre ‘Representaciones de Género y Estereotipos’, poniendo énfasis en la erradicación de los estereotipos negativos hacia la mujer en publicidad, corrigiendo las discriminaciones arbitrarias y las representaciones sesgadas que ya no resultan aceptables”.
Lo anterior cobra relevancia en el contexto actual de las comunicaciones, en el cual la digitalización, las redes sociales y la inmediatez han generado nuevos espacios publicitarios. Por otro lado, los consumidores utilizan estas herramientas para ser cada vez más activos y críticos con los contenidos que reciben, identificando rápidamente los formatos, mensajes y valores provenientes de la publicidad.
Adaptándose a este nuevo panorama, la sexta edición del Código Chileno de Ética Publicitaria, se enfocó principalmente en el tratamiento de los estereotipos difundidos por la industria de la publicidad y la publicidad nativa del tipo “influencers” y “bloggers”.
Hernán Triviño, presidente de la comisión que redactó la actualización, explicó que en su nueva redacción, el Código amplía y profundiza la regla base de respeto por la dignidad de las personas, establece que la publicidad debe evitar toda forma de denigración y discriminación arbitraria, y prohibe el uso de estereotipos negativos en publicidad.
En cuanto a la publicidad en medios digitales, interactivos y redes sociales, se refiere a publicidad nativa, identidad de la publicidad y contenido generado por los usuarios, aclarando que toda comunicación comercial debe ser claramente identificable como tal.
Experiencia internacional
Invitado por el CONAR, el presidente del International Council for Ad Self Regulation (ICAS) y director general de AUTOCONTROL (España), José Domingo Gómez Castallo, opinó que “las tecnologías digitales están transformando los medios de comunicación y las formas de aproximación de las marcas a los consumidores. En ese sentido, uno de los retos más importantes que el CONAR enfrenta es la mantención de una nueva plataforma mundial de autorregulación publicitaria frente a digitalización de los medios y, como consecuencia de ello, a los nuevos formatos surgidos y canales para comunicarse con el consumidor”.
Asimismo, el presidente de EASA (Alianza Europeas de Normativas Publicitarias), Stéphane Martin, destacó la labor de estas organizaciones, dado el importante rol de escuchar a los consumidores y al mercado, velando por el sano equilibrio entre ambos. “En nuestro sector hay una constante interacción entre la ley y la autorregulación”, dijo.
Sobre los influencers, Martin explicó que “es una publicidad y como tal tiene que respetar todas las normas de la publicidad. Es muy fácil de explicar: libertad de comunicar, que está muy bien porque hay nuevos medios, pero si hay una relación comercial con una marca, el influencer tiene que decírselo a su audiencia, y eso no es malo”.
Monitoreo y análisis 24/7
Dentro de su labor, CONAR monitorea las 24 horas del día y durante todo el año, el contenido publicitario difundido a través de la televisión, radio, revistas, agencias de publicidad y medios, analizando más de 50 casos comerciales o spots al año.
Además, el organismo trabaja intensamente en generar acuerdos que fortalezcan la ejecución responsable, honesta y ética de la publicidad en sus diferentes expresiones y medios.
Subsecretario valora la autorregulación
El Subsecretario General de Gobierno, Emardo Hantelmann, insistió en el rol que deben adquirir las agencias publicitarias frente a la audiencia: “Quiero felicitar a CONAR por este nuevo aniversario, junto con todos sus asociados, y desearles el mejor de los éxitos para los años que vienen, en tiempos de modernización de los medios de comunicación y la publicidad. Resulta imprescindible adoptar lo más pronto posible en el país, los máximos recaudos para evitar posibles prácticas cuestionables, tales como la manipulación de la información, ambigüedad del mensaje, poca claridad, no correspondencia entre la imagen y lo ofrecido, entre tantas otras”.
Agregó que “revisando un poco su historia, un hito que me llama la atención por su importancia es que en 1994 crearon el Tribunal de Ética, para poder recurrir en caso de que una publicidad sea objetada o se infrinja el Código de Ética. Y desde ese año a la fecha han tratado más de 900 denuncias, con un acatamiento en torno al 99%. Número no menor, que demuestra el compromiso y trabajo por tener un mercado publicitario sano, transparente, ético y con estándares mundiales”.
Sobre el CONAR
El Consejo de Autorregulación y Ética Publicitaria, CONAR es una corporación de derecho privado sin fines de lucro, cuyo objetivo principal es autorregular, desde la perspectiva ética, la actividad publicitaria nacional, de manera tal que se desarrolle en armonía con los principios y normas consagradas en el Código Chileno de Ética Publicitaria. A través de sus acciones, vela porque los mensajes publicitarios se encuadren dentro de los principios de legalidad, honestidad, moralidad y veracidad.
El CONAR está integrado por las instituciones y empresas privadas más importantes y representativas de la actividad publicitaria y comunicacional del país, a través de las asociaciones que las agrupan.
Equidad de género en la publicidad
La ex presidenta de CONAR Maribel Vidal, VP de Planificación Estratégica de McCann Santiago y presidenta del Women Leadership Council de MWG América Latina y Caribe, se sumó a las palabras de los expertos y destacó el papel de la mujer en el mundo publicitario: “Lo que está pasando con diversidad, inclusión y equidad de género es una conversación nueva. El desafío para la industria es este debate, donde todos estamos aprendiendo”.