Un clásico lleno de energía
Milón, un atleta de la Antigua Grecia, luchador célebre por su fuerza, fue quien inspiró la creación de la marca Milo en la década de 1930 en Australia, que nació como un saborizante para la leche diferente a lo que existía en ese momento, que además entregara energía proveniente del cereal, las vitaminas y minerales para alcanzar las metas del día a día.