Private Equity 2021 alcanzó US$539 millones en valor de transacciones durante el primer semestre
El informe Global Private Equity de Bain & Company de mitad de año encontró que, pese a las consecuencias de covid-19 y a los resultados del año pasado, la industria siguió creciendo durante este periodo y está en camino de tener su mejor año. El estudio revela que, por los estímulos masivos por parte de los gobiernos para mantener las economías y los mercados en movimiento, el ritmo de recuperación ha sido extraordinario.
No obstante, a los buenos resultados recalcan que siempre es peligroso pronosticar los próximos seis meses con base en el primer semestre del año.
Si estos resultados se confirman, la industria habría triplicado su tamaño durante los últimos 10 años a partir de 2011. El sobre dimensionamiento del capital privado ha creado fondos cada vez más grandes que hacen negocios más amplios y dado que la montaña de la industria se situó en un récord de US$ 3.3 billones al 30 de junio, queda mucho combustible para impulsar nuevas actividades.
Una primera mitad cálida
A nivel mundial, el capital privado generó US$ 539 mil millones en valor de transacciones durante el primer semestre de 2021. Eso está a la par con el promedio anual desde 2016 de US$ 543 mil millones. Pero si este año alcanza el US$ 1 billón sobrepasaría el récord alcanzado en 2006 de US$ 804 mil millones, luego que la industria alcanzó su punto máximo antes de la crisis financiera mundial.
Lo que está claro es que el tamaño de la transacción, y no el recuento de transacciones, está detrás del aumento de valor. La cantidad de acuerdos individuales aumentaron en un 16% en comparación con la primera mitad de 2020 después de estar muy por debajo del promedio a largo plazo de 4.000 en 2020. Este año el tamaño promedio de los acuerdos aumentó en un 48%, de US$ 718 millones a US$1.1 mil millones.
Además, la solidez de negociación se mostró en todos los ámbitos, pero el sector tecnológico siguió dominando la actividad. Uno de cada tres acuerdos de compra en la primera mitad involucró a una empresa de tecnología, y eso subestima el creciente atractivo de ellas para los inversores. Por lo tanto, dado que esta industria significa crecimiento y con ello múltiplos más altos, es probable que el sesgo hacia la inversión en estos sectores continúe en los meses y años venideros.
Los Special Purpose Acquisition Company siguen siendo importantes
El apetito voraz del mercado estadounidense por las ofertas públicas iniciales patrocinadas por SPAC, una empresa sin actividad operativa cuyas acciones se emiten en un mercado de valores con el fin de realizar una futura adquisición o fusión en un sector concreto, se detuvo repentinamente en abril. Todo esto en medio de un mayor escrutinio regulatorio de estas compañías, pero incluso si el volumen de nuevos SPAC se mantiene en niveles más bajos durante el resto del año, los montos que se registraron en enero de 2019 continuarán dejando su huella en el ecosistema de capital privado.
Al 30 de junio, estas compañías habían gastado US$49 mil millones para cerrar acuerdos de fusión, y otros US$48 mil millones se comprometieron a fusiones anunciadas. Eso significa que 419 de ellas disponen de US$133 mil millones para cotizar en la bolsa.
La prisa por los mercados públicos
Los SPAC ya han demostrado ser compradores dispuestos por compañías de cartera, lo que ayudó a impulsar el mercado en 2021. El valor de salida respaldado por la compra global hasta el 30 de junio se disparó a US$488 mil millones, un 10% más que el total de todo el año en 2020. Las Ofertas Públicas Iniciales (OPI) tradicionales también estaban en llamas, representando US$90 mil millones en salidas. Si esto continúa en la segunda mitad, el ritmo podría impulsar el valor de salida global hacia US$ 1 billón, y estaría duplicando el máximo anterior de US$ 521 mil millones en 2014.
El atractivo perdurable del capital privado
Devolver capital a los inversores a este ritmo solo puede mejorar el atractivo del bien privado como clase de activo. Pero los socios limitados (LP) no han necesitado mucho estímulo para mantener el volante girando. De acuerdo con la primera mitad de Preqin Inversor de Outlook, aproximadamente el 90% de ellos, dicen que planean invertir la misma cantidad de capital o más en los próximos 12 meses. Y durante la primera mitad de 2021, abrieron el grifo de par en par.
En general, la recaudación de fondos fue de hasta US$ 631 mil millones en el primer semestre, un ritmo que llevaría el total de fin de año cerca de US$ 1,3 billones. Los fondos de compra, de riesgo y de crecimiento fueron los que experimentaron mayores aumentos durante 2020, mientras que los fondos secundarios, en dificultades y de bienes raíces cayeron.
El camino por delante
Desde Bain aseguran que no hay forma de saber si la segunda mitad de 2021 reflejará la primera, pero hay un par de implicaciones clave para los inversores de capital privado en las cifras que hemos visto hasta ahora.
- Primero, a pesar de la robusta actividad desde enero, sigue existiendo evidencia de demanda reprimida. Como señalaron en el Informe de Global Private Equity de 2021, el recuento de transacciones ha estado por debajo de los niveles históricos desde el año pasado. Además, el ritmo de negociación aumentó en la primera mitad del año, y el mercado está en camino de entregar alrededor de 3.700 transacciones para fin de año.
- En segundo lugar, la fluidez en la tecnología se está volviendo más importante para todos los inversores de capital privado, tanto así que la innovación digital se está filtrando en todos los subsectores del mercado.
Las predicciones de Bain son impredecibles como las otras, por lo que no se puede saber lo que pasará con los resultados del próximo semestre, pero los vientos están a favor que estos sean positivos. Por otro lado, durante este tiempo las fuerzas que impulsaron la extraordinaria actividad del primer semestre no muestran signos de debilitamiento, a menos que algo cambie, es probable que el impulso continúe.