3 métricas para analizar si el contenido está funcionando
En la actualidad, muchos esfuerzos se dedican al marketing de contenidos, por lo que saber si están rindiendo y alcanzando los resultados esperados es fundamental.
Para esto existen las auditorías de contenido, que entregan una visión holística de lo que funciona y lo que no, y son muy útiles para determinar qué contenido hay que eliminar o mejorar.
Una auditoría de contenido se hace analizando las métricas de una cantidad significativa de URL, definiendo un período de tiempo para estudiar.
Decidir en qué métricas enfocarse al auditar su contenido para el rendimiento de SEO puede ser un desafío. Por eso, te dejamos 4 que son imprescindibles para hacer este análisis.
1. Tiempo de carga de la página
Los motores de búsqueda utilizan la velocidad de la página como una métrica de clasificación, y es más probable que deriven a los usuarios a las páginas que cargan más rápido porque permiten una mejor experiencia.
Pero, más allá de los motores de búsqueda, la carga lenta provocará frustración en la audiencia, aumentando las tasas de rebote y reduciendo las conversiones.
Antes de hacer cualquier optimización, se debe evaluar el tiempo de carga de las páginas con bajo rendimiento. Si éste es el problema, los cambios que implemente no serán útiles.
Algunas soluciones para optimizar los tiempos de carga pueden necesitar el apoyo de un desarrollador web para resolverlas, pero, si la página tiene imágenes, videos u otros archivos multimedia grandes, se pueden eliminar o comprimir para mejorar este aspecto.
También es posible que se esté llamando a medios de otras fuentes que tienen dificultades para cargar. Por ejemplo, el contenido incrustado puede requerir solicitudes HTTP adicionales y carga de datos, lo que lleva tiempo. Si este medio incrustado es clave para el contenido, habrá que evaluar si se puede reducir la cantidad de elementos incrustados o servirlos de una manera diferente.
2. Legibilidad
Publicar contenido sencillo y fácil de leer es importante tanto para los lectores como para los motores de búsqueda. Si la redacción es demasiado compleja, puede dificultar la tarea de los rastreadores web de Google para comprender el significado y los enlaces, lo que resultará en una mala clasificación.
La simplicidad, de hecho, es cada vez más importante dado que Google está priorizando el procesamiento del lenguaje natural (NLP) y continúa avanzando hacia la búsqueda semántica.
Las métricas de legibilidad ayudan a identificar el contenido que podría funcionar mejor si se simplifica. Editar el contenido acortando oraciones, usando palabras más simples y eliminando palabras innecesarias es una buena manera de mejorar este aspecto.
3. Backlinks
Es posible que el contenido, independiente de su rendimiento, atraiga valiosos backlinks. Los backlinks externos de fuentes relevantes y autorizadas brindan señales de confianza vitales para los motores de búsqueda.
El contenido de bajo rendimiento también podría generar mayor tráfico si está vinculado a contenido y páginas relevantes en otras partes del mismo sitio, es decir, enlaces internos.
Los datos de backlinks se pueden obtener en Google Search Console. Además, existen una gran cantidad de herramientas de SEO que proporcionan datos de backlinks externos: Moz, Majestic SEO, Semrush y Ahrefs son algunas de las herramientas más populares.
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